Las reglas para los placeres sensibles

· Cocinar es una conversación, en la medida que reúne los valores, los gustos, los rituales y las palabras que se transmiten de generación en generación y desempeñan un papel social muy importante, no sólo durante las vacaciones.

· Cocinar es convivencia e intercambio, sobre todo cuando se cocina para los demás, una pareja, un amigo, o los niños.

· Cocinar es educar y comer en la mesa es una buena manera de enseñar a los niños sobre el respeto a la comida, aprender a ser responsables de sus propios cuerpos, y enseñarles el arte de la conversación, los modales, y el placer.

· Cocinar es divertido, desde recoger los frutos a la preparación de los platos a servir la preparación final, y compartir los resultados con los demás.

· La cocina es saludable.

· Cocinar con humor: no nos tomemos tan en serio como para hacer platos con ingredientes, una batería completa de cocina y dos días de preparación. Si el pollo se cae en la mesada, levantarlo, si el pastel se agrieta, congelarlo.

· Cocinar es improvisar: las recetas son una guía, no una fórmula para dejarse intimidar. Conformate con lo que tenés y cómo a vos te gusta.

· Cocinar es el gusto, elevar la conciencia y el refinamiento de los sentidos, en armonía y en combinación, para celebrarlo con los demás.

· Cocinar es memoria, ya que vincula la cultura y los valores de una persona. Cada vez que comemos algo, el sabor y la memoria de todas las veces que hemos comido ese plato viven en el presente.

· Cocinar es el alimento del cuerpo y el alma.